sábado, 30 de noviembre de 2013

VAYA COSA

Tiene los ojos más otoñales que he logrado ver, un lunar en la mejilla que le caracteriza, pero lo que realmente le da su toque es que no deja de sonreír.

Tiene todo el tiempo del mundo, porque deja escapar el viento y éso a mí, me encanta. Conoce Madrid por sus numerosos paseos que le amortiguan de la realidad de la cual siempre quiere huir.

Adoro cuando empieza a pensar y olvida como parar, cuando parece un loco, porque así yo, también puedo parecerlo-y hasta mi pelo rizado puede parecerlo-

Nunca hace nada; pero siempre tiene algo que hacer, siempre le reclama algún gato extraviado en algún bar, sino el se pone a jugar a ser Dios sobre el papel, sino está con sus niños y sino siempre estoy yo para robarle algo de su infinito tiempo, es que a mí me hace falta mucho y a él le sobra más.

Y es ahí caminando por su pelo cortado (odia el pelo corto pero le encanta cortárselo), dudando entre si me puede matar en un ataque de locura o está loco por mí...

...cuando empieza a creer en el amor.

No hay comentarios:

Las más Vistas, pero no las Mejores