Nuestro Héroe se sentó en un banco que pronto sería de él y comenzó a observar a esos trajes con hombres comiendo en los otros bancos. El Héroe al no tener comida inhalaba el humo de veneno ayudado de su amiga Dora.
Dora era una chica pelirroja y de ideología...digamos roja como su pelo, estaba siempre con el Héroe y cada vez que este la tocaba esta se ponía caliente, ardiendo literalmente. Su pasión por el Héroe era tal que Dora se grabó las iniciales de él en su piel (J.C.)
Dejemos a Dora en paz. El Héroe tenía un agujero negro en el estómago y se tenía que conformar con ver a los trajes con hombres comer en ese "comedor social". El Héroe sólo inhalaba veneno ya que se quería suicidar poco a poco, gota a gota la vida escapa de él hacia algún desdichado que deseaba vivir más. Los trajes con hombres se largaron del "comedor social" y al poco se posaron tres palomas blancas en formación triangular(en esta posición ven antes salir el Sol) y en su centro se posó una paloma negra como la noche más oscura de tus miedos. Esta última le dijo algo a una blanca que apresuradamente se acercó a el Héroe y le comentó.
-Héroe, Héroe has de volver ya a tu Maravilla. Te espera conocer a una mujer que conoces desde hace dos años.
-¿Cómo puedo conocer a alguien que ya conozco?-Preguntó extrañado el Héroe.
-Piensa en ti, hay gente que te conoce desde siete o más años y aún no sabe nada de ti ¡Ni tu nombre siquiera!
-Cierto es palomita de nieve. Ala, me voy de este "comedor social"
-¿Comedor social? Si esto es un parque.
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