Luchamos con nuestras obras en el metro de Madrid, en los bares y en los corazones. Seremos grandes con el epicentro en Madrid, nuestro terremoto hará temblar los cimientos de las ciudades. Hemos sido creados para luchar con el alma. Le dije a una miembro, a mi pequeña sonriente.
-Tu antes tenías un bosque de él en tu interior y lo quemaste, ten cuidado con la ceniza que actúa de abono y puede brotar un bosque aún mayor ¡y de hoja perenne!
-Tranquilo cariño, las cenizas después del incendio provocado se las llevó el aliento del aire.
-Bien hecho, yo fingí quemar mi bosque, mas no fue así, exhalé niebla por la boca y lo oculté, pero sigue creciendo y creciendo a más no poder.
-El tuyo si que es perenne.
-Ya ves nena.
Hemos venido para quedarnos L.C.D.S.
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